lunes, 12 de enero de 2009

Desisto

Me tumbo en la cama, cansada.
Enchufo a Bob, pero no, hoy no me apetece el sonido de la armónica. La alegría de los Beatles tampoco, ni siquiera la fuerza de los Who.

Así que escucho el silencio. Enciendo un cigarro, que me relaja y me alivia y me voy a la nevera a por una cerveza. Comienzo a desinhibirme. Decido ir a por un cubata “cuanto más fuerte mejor” y me vuelvo a la cama.
ERROR! Olvidé que ni fumo ni bebo.

Vale, busquemos otra solución… cojo un libro y empiezo a leer, me adentro en las grandes aventuras de Robinson Crusoe, Daniel Defoe era un escritor, no como la gentuza de ahora, decía mi profesora de literatura. Y que razón llevas Ana Tere. Continúo leyendo y caigo en la cuenta que ayer Andréscabróndeseñorlobo me ha desvelado el final.

Cojo papel y boli y sin saber qué voy a escribir, empiezo. Jo! Me he quedado sin tinta.
¿Esto es qué es? Desisto. Me desespero y ¿Qué hago? Nada. ¡Qué vida más triste!

Entonces recuerdo que estamos en el siglo XXI, con ordenadores e historias de estas. Así que decido hacerme un blog, para contar mis inútiles historias. Para desahogarme, para escribir cosas sin sentido, para dejar hueco para la imaginación y para recordar viejos y no tan viejos momentos.

1 comentario:

  1. Bob nunca cansa! Armonicas y una voz subrealista.

    Agarrate a un buen vaso de martini con mucho hielo, despeja la ideas, y aclara el alma.

    Besitos olguisss..

    Mik

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